Ryzen 3: Diseñados para usuarios que buscan un buen rendimiento en tareas cotidianas y juegos. Suelen tener menos núcleos e hilos en comparación con los modelos Ryzen de categorías superiores, pero son opciones sólidas para presupuestos más ajustados.

Ryzen 5: Ofrecen un equilibrio entre rendimiento y precio, siendo una opción atractiva para jugadores y usuarios que realizan tareas más exigentes, como la edición de contenido multimedia o la multitarea. Los modelos Ryzen 5 suelen tener más núcleos e hilos que los Ryzen 3.

Ryzen 7: Diseñados para usuarios que necesitan un rendimiento más robusto, ya sea para juegos intensivos, edición de video o trabajo con aplicaciones que aprovechan muchos núcleos e hilos. Los procesadores Ryzen 7 generalmente tienen más núcleos e hilos que los modelos Ryzen 5.

Ryzen 9: La categoría más alta en la serie Ryzen para consumidores. Ofrecen el máximo rendimiento con un mayor número de núcleos e hilos. Son ideales para usuarios que realizan tareas muy exigentes, como transmisión en vivo, renderización 3D o edición de video profesional.
En resumen, la numeración en los procesadores Ryzen sugiere la categoría de rendimiento, y generalmente, a medida que avanzas de Ryzen 3 a Ryzen 9, obtienes más núcleos, hilos y rendimiento en general. Es importante tener en cuenta tus necesidades específicas y presupuesto al elegir un procesador.

La “G” en los procesadores Ryzen de AMD con un número de modelo (por ejemplo, Ryzen 5 3400G) indica que estos procesadores tienen gráficos integrados. En otras palabras, la “G” se refiere a la presencia de una GPU (Unidad de Procesamiento Gráfico) integrada en el mismo chip del procesador.

En comparación con los procesadores Ryzen sin la designación “G”, que requieren una tarjeta gráfica discreta para la salida de video, los modelos “G” incluyen una GPU Radeon Vega integrada.

Esto permite a los usuarios utilizar la salida de video directamente desde la placa madre sin necesidad de una tarjeta gráfica adicional.

Estos procesadores son especialmente útiles en sistemas donde no se requieren gráficos de alta gama, como en sistemas de oficina o computadoras personales para tareas diarias.

Además, son populares en configuraciones de presupuesto y sistemas compactos donde la eficiencia energética y el espacio son consideraciones importantes.

Modelos de bajo consumo energético. Los procesadores Ryzen con la letra “U” están optimizados para una eficiencia energética máxima, lo que los hace ideales para sistemas portátiles o dispositivos que requieren una duración de batería más larga.

Modelos de alto rendimiento para portátiles. Los procesadores Ryzen con la letra “H” están diseñados para ofrecer un rendimiento robusto en computadoras portátiles de alto rendimiento y estaciones de trabajo móviles.

Modelos de alto rendimiento. Los procesadores Ryzen con la letra “X” tienden a tener velocidades de reloj más altas y, a menudo, están diseñados para ofrecer un mejor rendimiento en aplicaciones que requieren una gran potencia de procesamiento.

En los procesadores Ryzen de AMD, los números de núcleos e hilos se refieren a la cantidad de unidades de procesamiento en el chip y a la capacidad de manejar múltiples tareas de manera simultánea. Aquí hay una breve explicación:

Núcleos: Los núcleos son unidades de procesamiento independientes en un procesador. Cada núcleo puede realizar tareas de manera independiente. Un procesador con más núcleos generalmente puede manejar mejor las tareas que se ejecutan en paralelo, como la multitarea o las aplicaciones que pueden dividir su carga de trabajo en múltiples hilos.

Hilos: Los hilos, en el contexto de los procesadores Ryzen, se refieren a las unidades de ejecución de tareas individuales dentro de un núcleo. Los procesadores modernos a menudo utilizan la tecnología SMT (Simultaneous Multi-Threading), que permite que cada núcleo maneje múltiples hilos de manera simultánea. Esto puede mejorar el rendimiento en aplicaciones optimizadas para múltiples hilos.

Por ejemplo, si ves un procesador con especificaciones “8 núcleos y 16 hilos“, significa que tiene ocho núcleos físicos y la capacidad de manejar hasta 16 hilos simultáneos (gracias a la tecnología SMT que duplica la capacidad de procesamiento).

En términos prácticos, más núcleos e hilos son beneficiosos para tareas que pueden aprovechar la capacidad de procesamiento paralelo, como la edición de video, la renderización 3D, la transcodificación de medios y la multitarea intensiva.

Sin embargo, para aplicaciones que no pueden aprovechar muchos núcleos, la velocidad de reloj y la arquitectura del procesador también son factores importantes.

En el contexto de los procesadores Ryzen de AMD, cuando se menciona el “reloj”, generalmente se hace referencia a la velocidad del reloj del procesador, que se expresa en Hertz (Hz) o en unidades más grandes como megahercios (MHz) o gigahercios (GHz). La velocidad del reloj es la frecuencia a la cual el procesador ejecuta instrucciones y realiza operaciones por unidad de tiempo.